Una pandemia que convirtió nuestros hogares y burbujas de convivencia en el refugio más seguro no parece el contexto más fácil para un servicio que se basa en proporcionar una ayuda a domicilio externa para el cuidado de personas mayores. La larga experiencia de Sonia y Nati en la coordinación de Mutuam a Casa, sin embargo, les permitió lidiar con las dificultades y el servicio se adaptó a los nuevos condicionantes para seguir ofreciendo la confianza de siempre. ‘Al principio de la pandemia había muchas reticencias, pero las vacunaciones mejoraron mucho la situación’, explica Sonia, que asegura que muchas personas, sin embargo, seguían con miedo. Para tranquilizarlas, desde Coordinación, les explicaron que cumplían todos los protocolos establecidos por el Departament de Salut y que los cuidadores y cuidadoras llevaban equipos de protección individual (EPI) y recibían una formación constante y al día, en función de la situación de la pandemia.
Nuevas rutinas para reforzar la seguridad en el cuidado de personas mayores
Los y las cuidadoras tuvieron que modificar su forma de trabajar para garantizar la máxima seguridad en el cuidado de personas mayores en el domicilio y la tranquilidad de sus familias. Ahora, señalan, es necesario mantener algunas de estas rutinas, y tanto el cuidador como la persona atendida, deben llevar la mascarilla mientras se presta el servicio. Mutuam a Casa tomó y mantiene algunas medidas adicionales, como la de destinar parte de la plantilla a tratar exclusivamente casos de Covid, con el objetivo de minimizar riesgos para el resto de clientes atendidos.
Rompiendo el hielo en la ayuda a domicilio
Los motivos de estas reticencias por parte de las personas mayores, dicen, son variados: que no aceptan que necesitan una mano, que piensan que estarían más a gusto si sus hijos o hijas se hicieran cargo, que tienen mal olor para ser atendidas por un desconocido… ‘Debemos entender que somos nosotros los que entramos en su casa e invadimos su intimidad ‘, reconoce Nati, que asegura, sin embargo, que los profesionales tienen sus propias estrategias para romper el hielo y ganarse la confianza del nuevo usuario.
En este sentido, explican, la selección del trabajador o trabajadora que prestará un servicio determinado se realiza de forma muy cuidadosa y personalizada . Ante todo, hablan con la persona a la que se atenderá y su familia y hacen un diagnóstico social en el que se identifican las necesidades concretas y si hay alguna preferencia que se tenga en cuenta. Entonces, se busca entre los profesionales de Mutuam en Casa aquéllos que se adecuan más al servicio, teniendo en cuenta incluso aspectos como el carácter, para asegurar la satisfacción de quien se atiende. ‘A una persona muy tímida procuraremos ofrecerle un trabajador más prudente para que no se sienta cohibida, mientras que a una más abierta quizá le encaja más alguien extrovertido’, describen las coordinadoras.
La confianza llega pronto al domicilio
Después de tantos años al frente del servicio de ayuda y cuidados a domicilio, desde coordinación, saben que las reticencias iniciales se desvanecen pronto, porque el impacto en la calidad de vida de las personas mayores y en la de sus familias es muy notorio y positivo. De hecho, dice Nati, cuando se trata de servicios de muchas horas o incluso servicios activos desde hace años, ‘la relación es de tanta confianza que muchos usuarios desean que llegue la cuidadora para disfrutar de su compañía ‘. Y recuerda una frase que repiten mucho: ‘De haberlo sabido antes…os hubiéramos llamado más pronto’.
La calidad del servicio tiene como pilares fundamentales la confianza, la Atención Centrada en la Persona y la valía profesional y el compromiso de los cuidadores y cuidadoras, a los que se mima con especial atención desde el área de coordinación y desde la empresa, asegura Sonia. Otro hecho muy importante es que la plantilla es muy estable y, a diferencia de otras empresas, siempre se cumple lo establecido en el convenio del sector y los cuidadores y cuidadoras se contratan bajo el régimen general de la Seguridad Social. Nati añade que Mutuam a Casa siempre vela ante todo por la seguridad laboral, porque ‘no todo vale, para facturar un servicio’.
Sonia Gañan y Nati Sanmartín son coordinadoras del servicio de ayuda domiciliaria Mutuam a Casa
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